¿Por qué es el momento ideal para revisar tu plan financiero personal o crear uno?

A pesar de que los últimos años han estado marcados por un alto grado de incertidumbre, ya sea por acontecimientos como la pandemia del Covid-19, la invasión de Ucrania por parte de Rusia o el aumento de las tensiones políticas y económicas entre China y Estado Unidos, seguimos creyendo que tener un plan es la mejor manera de acercarnos al tipo de vida que queremos tener.

Por otra parte, la propia incertidumbre se convierte en el argumento más importante a favor de un plan, y no al contrario. Un plan siempre debe partir de los objetivos que nos proponemos alcanzar y debe tener margen de adaptación para evolucionar según las circunstancias. Si el "cómo" del plan puede estar sujeto a un mayor grado de variación, el "qué" debe tener algo más de firmeza - pudiendo también evolucionar, lo más importante de todo es que caminemos en la dirección de algo que sea importante para nosotros.

Pero empecemos por el principio:

¿Qué es un plan financiero?

Aunque la expresión puede evocar una serie de realidades complejas y temas que podemos encontrar fuera de nuestro alcance, un plan financiero puede ser algo relativamente sencillo. 

En el fondo, se trata de saber cuáles son nuestros objetivos a corto, medio y largo plazo, y establecer los pasos que queremos tomar para alcanzarlos. 

Si trasladamos esta cuestión al plano financiero, implica todo lo que en nuestra vida tenga que ver con dinero, lo cual comprendemos rápidamente que abarca una gran parte de nuestras actividades cotidianas.

Ahora bien, esto puede terminar por crear una noción común, pero equivocada, de nuestros objetivos. El dinero no es el objetivo, sino la herramienta que nos permitirá alcanzarlos para tener una vida que podamos disfrutar.

¿Por qué revisar o crear mi plan ahora?

Empezando por lo obvio, porque en algún momento hay que hacerlo. No porque sea necesario estar constantemente pensando en el asunto, sino que, como hemos dicho antes, a medida que las condiciones cambian, nuestro plan también debe ajustarse a la realidad.

Igualmente es cierto que, realmente, no existe un mal momento para empezar o revisar nuestro plan. Cuanto antes iniciemos este proceso y lo revisemos regularmente, menos probabilidad habrá de perder oportunidades debido a la época en que decidimos actuar.

Resulta que el ser humano, y específicamente nuestro cerebro, fue diseñado para identificar patrones. Por eso, desde hace ya unos años, ¿a qué vinculamos esta época del año?

Volver a clases, trabajar, nuevos ciclos y empezar de nuevo. Todos estos aspectos hacen que enero sea un momento ideal para establecer nuevas metas y objetivos.

Podemos y debemos aprovechar estas oportunidades en las que somos más propensos al cambio para revisar nuestra situación actual y ver si el progreso que estamos haciendo es el adecuado para lo que queremos lograr.

Lo importante es que no dejemos nuestros proyectos solo como un conjunto de intenciones a las que de vez en cuando prestamos atención. La consistencia con el tiempo es lo que nos permite llegar realmente a donde queremos, siempre y cuando nos mantengamos en la dirección correcta.

¿Qué debes tener en cuenta en tu plan?

Por encima de todo, hay que considerar cuáles son sus verdaderos objetivos, sea a corto, medio o largo plazo, y darse cuenta si está canalizando su dinero para alcanzarlos. Esto debería incluir un control de los gastos, los cuales deberían estar por debajo de los beneficios para permitirle ahorrar e invertir.

Para ir más lejos y saber más, siempre podrá hablar con un experto en la materia - pero este ya sería un excelente primer paso.

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Exención de responsabilidad: La información proporcionada en esta publicación tiene únicamente fines educativos y no debe considerarse consejo financiero o de inversión.